El diario neoyorquino recopiló testimonios sobre las terribles consecuencias generadas por las “terapias de reasignación de sexo” a menores de edad.
Las terribles consecuencias generadas por las denominadas “terapias de reasignación de sexo” a menores de edad cada vez reciben más oposición, incluso en sectores considerados liberales.
En un artículo de opinión del New York Times, medio catalogado de izquierda por algunos sectores, la columnista Pamela Paul publicó diversas historias de los afectados y consultó a especialistas.
Testimonios de los padres
Según Pamela, muchos de los padres con hijos diagnosticados con disforia de género (DG) creían que sus hijos eran homosexuales o que enfrentaban una serie de problemas complicados, pero muchos dijeron que se sentían obligados por los especialistas en en esta materia, los médicos, las escuelas y la presión social a acceder a la identidad de género declarada de sus hijos, incluso si tenían serias dudas.
Estos padres de los niños que se consideran trans, le dijeron a la escritora que sus hijos conocieron a personas influyentes transgénero en YouTube o TikTok, sin embargo, otros menores aprendieron estas ideas en el aula, a través de planes de estudio proporcionados por organizaciones de derechos trans.
En uno de los testimonios, un padre denunció la coacción a la que fue sometido en una “terapia”. Según lo relatado, participó en una reunión breve y “frente a mi hijo, el especialista dijo: ‘¿Quieres un hijo muerto o una hija viva?’”.
Sin embargo, en el artículo se cita como el año pasado, 21 expertos de nueve países manifestaron a medios de comunicación las razones por las que creían que no había «evidencia confiable que sugiriera que la transición hormonal sea una medida efectiva de prevención del suicidio».
Testimonio de los hijos
Grace Powell, con 23 años de edad, podría considerarse el testimonio referencial en el texto.
Esta joven descubrió con 12 o 13 que podía ser chico. En esa época se consideraba impopular, sufría acoso escolar y entraba y salía de estados depresivos. A través de las redes se convenció de que si sentía disgusto con su cuerpo era porque es el “equivocado”.
A los 17 se lo dijo a sus padres, fue a un especialista, al año siguiente estaba en pleno tratamiento hormonal y se había hecho una doble mastectomía. En la universidad se alojaba en una residencia masculina y se veía a sí misma como un hombre gay muy afeminado.
Hoy ha ‘detransicionado’ (proceso de detener o revertir una identificación transgénero o una transición de género) y reprocha que nadie investigara las causas subyacentes a su problema, como el abuso sexual que sufrió de niña. «Lo que debería ser un asunto médico y psicológico se ha transformado en político», lamenta la joven.
- En cuanto a la consulta con especialistas, una de las personas citadas fue Laura Edwards-Leeper, psicóloga clínica infantil.
- “Hay que tomarse el tiempo para evaluar realmente lo que está pasando y escuchar el cronograma y obtener la perspectiva de los padres para poder crear un plan de tratamiento individualizado. Muchos proveedores se saltan por completo ese paso” denunció.
- La escritora también consultó a Stephanie Winn, terapeuta matrimonial y familiar autorizada en Oregon, que recibió capacitación en atención de afirmación de género y trató a múltiples personas consideradas pacientes transgénero.
- Según la reseña, en 2020, después de encontrar videos de detransición en línea, Winn comenzó a dudar del modelo de afirmación de género. En 2021 se pronunció a favor de abordar la DG de una manera más considerada.
- Por esta nueva posición, en abril de 2022, la Junta de Consejeros y Terapeutas Profesionales Licenciados de Oregón le dijo a Winn que estaba bajo investigación. Su caso finalmente fue desestimado, pero ella decidió no involucrarse en abordar menores y solo ejerce en línea, donde muchos de sus pacientes son padres preocupados de niños que se identifican como trans.
- Entre otras cosas, en el texto, también se hace referencia al caso Tavistock, la clínica londinense referencia mundial en atención a la disforia de género infantil que posteriormente fue noticia a raíz de una investigación.
- Hay que recordar que este centro fue cerrado recientemente por el gobierno británico, debido principalmente a las denuncias sobre como los niños eran sometidos a tratamiento hormonal e inculso mutilación genital prácticamente en la primera consulta con el “especialista” según medios internacionales.
- En el artículo, se destaca un informe encargado por el Servicio Nacional de Salud de esa nación europea donde señalan que “el personal de atención primaria y secundaria nos ha dicho que se sienten bajo presión para adoptar un enfoque afirmativo incondicional y que esto está en desacuerdo con el proceso estándar de evaluación y diagnóstico clínico que han sido capacitados para realizar en todos los demás encuentros clínicos”.
- La Clínica Tavistock era la única que en aquel momento contaba con una Unidad de Género en Reino Unido. Fuente: Google Maps.
- Otras Denuncias
- Según lo publicado en el diario neoyorquino, Suecia, Noruega, Francia, Países Bajos y Gran Bretaña (pioneros en estos temas considerados de género), ahora reconocen a través de los profesionales médicos que las primeras investigaciones sobre intervenciones para la DG infantil eran defectuosas o incompletas.
- Otros países han detenido o limitado recientemente el tratamiento médico y quirúrgico de los jóvenes con disforia de género, en espera de más estudios.
- La columnista también hace diversas referencias políticas. Considera que la mayor amenaza en temas de derechos para las denominadas personas transgénero proviene de los republicanos, pero la rigidez doctrinal del ala progresista de los democratras fue calificada como decepcionante, frustrante y contraproducente.
- Al final pidió, entre otras cosas, que se priorizara la compasión. Denunció que los niños con DG, en vez de ser tratados como pacientes que merecen ayuda profesional imparcial, a menudo se convierten en peones políticos.
- Publicado en: EVANGÉLICO DIGITAL-PERIODICO UNO